Mala suerte

Me despierto a las siete de la mañana, busco la ropa que tenía preparada para hoy.
La camisa tiene una mancha en uno de los botones...¡Bah, una corbata lo arregla todo!
Ya estoy arreglado, ahora los libros. Cojo el libro de primero, el de segundo y los que tienen que hacer los de cuarto.
Bajo al garaje, me subo en el coche, voy a arrancar y... está sin batería ¡Anoche me dejé las luces encendidas!.
Bueno, miro el reloj, ¡las ocho menos cuarto! Tengo quince minutos para llegar a la parada.
Salgo corriendo, hacia la puerta del garaje; el mando, el mando... ¡Mierda! Se lo dejé a la vecina.
Tranquilo, las llaves, ¡busca las llaves!... ¡Arriba!
Llego al ascensor, le doy al boton, no baja, otra vez pulso, ¡No baja!
Subo corriendo por las escaleras (106 escalones hasta el felpudo de mi puerta)
¡Mi récord! ni dos minutos en subir.
Bajo de nuevo al garaje, esta vez por el ascensor.
Salgo corriendo del edificio para llegar en...¡10 minutos!, pero yo puedo, si he subido los escalones en dos minutos puedo llegar en diez a la parada.
¡Por fin! Después de tanto correr, cruzarme con una señora mayor a la que casi tiro, y un coche que poco mas y me atropella. Lo hice. Llegé. Me subo al autobús.
Media hora despues llego al instituto. Mi calvario diario, y encima tarde.
Nada más entrar, me cae un zumo encima, (Menos mal que vacío) desde la puerta. ¿Cómo habrán conseguido que se mantenga ahí?. Bueno, eso no importa, ahora hay que regañarles.
-¿Quién ha sido?
-¿No sale nadie?. Muy bien, Parte colectivo y un punto menos en el examen para todo el mundo.
Despues de escuchar las quejas y reproches, por fin veo mi descanso, veo la silla... toda llena de tiza.¿Pero no se cansan? y para colmo de mesa tengo un pupitre, ¿Dónde esta la mesa del profesor?
No pasa nada, tranquilizate, es primera hora, y reparte los examenes que después se quejan de que no les da tiempo.
Los termino de repartir, y empieza la caza de chuletas.
Miro, lo primero a los tipicos "malos", y encima se ponen todos juntitos, para que no se les note ¿no?...
Veo a uno con toda la silla escrita... Buena letra, ¿Por qué no me la hará asi en el cuaderno?
Un examen confiscado, uno menos que corregir
Me canso de dar vueltas, limpio un poco la silla y me siento.
Pongo las manos debajo de la mesa para acercarla y...¡premio! toda llena de chicles (o espero que sean chicles ¡puajj!) Disimulo un poco, creo que nadie me ha visto.
Despues de aguantar seis horas de clase y a mocosos insolentes (¡ay! si todo fuera como antes...)
Llego a mi casa, (en bus de nuevo), y me pongo a comer las sobras del domingo que me dio mi madre en un taper.
Me paso toda la tarde corrigiendo los examenes.
Me acuesto.
Por la mañana voy al coche... sin batería.


1 comentario:

Jmdeum dijo...

Así es la vida de los llamados "adultos"... ¡Y el de tu historia tiene suerte porque tiene un buen trabajo: muchas vacaciones!... jajajaja... Otro día cuentas lo de las vacaciones.
Gracias por ponerte en el pellejo de los enseñantes.
Un saludito.